sábado, 12 de junio de 2010

Last Days
Gus Van Sant, 2005.

Si no eres fan de Van Sant, puedes ahorrarte el sufrimiento.
Si eres fan de Nirvana, también.
Eso si, si quieres ver el suicidio de un pseudo Kurt Cobain diestro con un final de lo más "Barroco" (resurrección y ascenso a los cielos incluidos), adelante.
Yo como admiradora de ambos me encuentro con el corazón dividido.

1 comentario:

Core dijo...

En su momento fue bastante horrible, porque aún no estaba acostumbrada al cine lento (hace bastante de que la vi), pero ahora me parece una obra sublime, probablemente el mejor tributo que le harán -indirectamente- al señorito Cobain.