lunes, 19 de enero de 2009

Esta es una de mis partes favoritas de la peli "Abierto hasta el amanecer" (a parte claro está del trozo en el que sale la orquesta tocando guitarras fabricadas con trozos de humanos), todo un clásico. Me gusta por que Salma todavía no tenía el culo tan gordo que un gatico pequeño podría vivir en él, y porque Tarantino se pone las botas con su fetiche particular, los pies. Y es que es todo tan burdo que me hace reir, JÁ!

No hay comentarios: